Los antiguos reclamos de los frigoríficos que no entraron en el grupo selecto a los que el estado brasileño optó por transformarlos en gigantes, nunca fueron atendidos. Entendían una competencia desleal el aporte financiero hecho desde el estado solo para unos pocos. De acuerdo al comunicado librado esta semana por la gremial brasileña que representa a pequeños y medianos frigoríficos, la situación se hace insostenible y muchos caminan hacia el cierre. A esto se suma el cuestionamiento que se hizo el año pasado al conocerse los aportes financieros del JBS al partido de gobierno para la campaña electoral. Hay de por medio también una investigación del Tribunal de Cuentas de la Unión que pretende conocer los detalles de la operativa financiera entre el gigante de la carne y el banco de la tesorería brasileña.
Este es un titular de la prensa brasileña de noviembre de 2014 que informa que el banco estatal amparándose en el secreto bancario no permitía el acceso a la información.
Este es el informe que tomamos y traducimos de la pagina digital de Brasil pecuaria.com.br que publicó un informe del diario Valor de San Pablo.
Según la
entidad, “los más de 600 pequeños y medios frigoríficos que operan en el país
estan en vías de desaparición por la brutal dominación que se instaló en el
sector en los últimos años y que continúa acentuándose”, en una referencia al
JBS.
“No existe
igualdad de oportunidades en el sector de la carne bovina brasilera por la
ausencia de un tratamiento igualitario a las empresas, lo que eliminó la
competencia. El BNDES (Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social) creó un
gigante que está engullendo a todo y a todos y que parece fuera de cualquier
control” , afirma el Presidente Ejecutivo de Abrafrigo, Péricles Salazar, en la
nota.
La gremial
“pide socorro” a la ministra de Agricultura Katia Abreu, a la presidente Dilma
Rousseff, y a los parlamentarios del Frente
Parlamentario de la Agropecuaria
Brasilera , para que “se busque una solución urgente” a la
cuestión.
En la
evaluación de Salazar, “en poco tiempo, con la desaparición de estas empresas
(pequeños y medianos frigoríficos), el mercado interno, las exportaciones, el
consumidor y los pecuaristas, irán a quedar en las manos de apenas dos o tres empresas”. Afirma en el
comunicado, “que hoy en día los márgenes están apretados por la competencia
depredadora que se hace con dinero
público…..Muchas unidades están cerrando, sin condiciones de supervivencia”.
El
dirigente entiende que “la única salida para la manutención de un equilibrio
económico saludable en el sector, sería la adopción de una política pública volcada exclusivamente
para los pequeños y medianos frigoríficos, para que puedan competir en igualdad
de condiciones”. En la evaluación de la Abrafrigo , los sectores
de aves y suinos también caminan a una concentración.
De acuerdo
con la Abrafrigo ,
los 600 pequeños y medianos frigoríficos de Brasil son responsables por más de
900 mil empleos y por el abastecimiento de casi el 50% del mercado interno de la carne bovina.
Requerida
por Valor, JBS prefirió no manifestarse sobre el asunto