viernes, 20 de febrero de 2015

Frigorificos chicos comprometidos en Brasil ante competencia desleal

Los antiguos reclamos de los frigoríficos que no entraron en el grupo selecto a los que el estado brasileño optó por transformarlos en gigantes, nunca fueron atendidos. Entendían una competencia desleal el aporte financiero hecho desde el estado solo para unos pocos. De acuerdo al comunicado librado esta semana por la gremial brasileña que  representa a pequeños y medianos frigoríficos, la situación se hace insostenible y muchos caminan hacia el cierre. A esto se suma el cuestionamiento que se hizo el año pasado al conocerse los aportes financieros del JBS  al partido de gobierno para la campaña electoral. Hay de por medio también una investigación del Tribunal de Cuentas de la Unión que pretende conocer los detalles de la operativa financiera entre el gigante de la carne y el banco de la tesorería brasileña.


Este es un titular de la prensa brasileña de noviembre de 2014 que informa que el banco estatal amparándose en el secreto bancario no permitía el acceso a la información.




Este es el informe que tomamos y traducimos de la pagina digital de Brasil pecuaria.com.br que publicó un informe del diario Valor de San Pablo.


La Asociación Brasilera de Frigoríficos (Abrafrigo) divulgó esta semana un comunicado en el que  “alerta que frigoríficos pequeños y medianos van a desaparecer”.  Afirma la nota que si nada se hace “JBS va a dominar por completo la producción de proteínas de carnes en el país”.

Según la entidad, “los más de 600 pequeños y medios frigoríficos que operan en el país estan en vías de desaparición por la brutal dominación que se instaló en el sector en los últimos años y que continúa acentuándose”, en una referencia al JBS.

“No existe igualdad de oportunidades en el sector de la carne bovina brasilera por la ausencia de un tratamiento igualitario a las empresas, lo que eliminó la competencia. El BNDES (Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social) creó un gigante que está engullendo a todo y a todos y que parece fuera de cualquier control” , afirma el Presidente Ejecutivo de Abrafrigo, Péricles Salazar, en la nota.

La gremial “pide socorro” a la ministra de Agricultura Katia Abreu, a la presidente Dilma Rousseff, y a los parlamentarios del Frente  Parlamentario de la Agropecuaria Brasilera, para que “se busque una solución urgente” a la cuestión.

En la evaluación de Salazar, “en poco tiempo, con la desaparición de estas empresas (pequeños y medianos frigoríficos), el mercado interno, las exportaciones, el consumidor y los pecuaristas, irán a quedar en las manos  de apenas dos o tres empresas”. Afirma en el comunicado, “que hoy en día los márgenes están apretados por la competencia depredadora  que se hace con dinero público…..Muchas unidades están cerrando, sin condiciones de supervivencia”.

El dirigente entiende que “la única salida para la manutención de un equilibrio económico saludable en el sector, sería la adopción  de una política pública volcada exclusivamente para los pequeños y medianos frigoríficos, para que puedan competir en igualdad de condiciones”.  En la evaluación de la Abrafrigo, los sectores de aves y suinos también caminan a una concentración.

De acuerdo con la Abrafrigo, los 600 pequeños y medianos frigoríficos de Brasil son responsables por más de 900 mil empleos y por el abastecimiento de casi el 50%  del mercado interno de la carne bovina.
Requerida por Valor, JBS prefirió no manifestarse sobre el asunto