“La Argentina es una plataforma de conocimientos y Paraguay necesita adquirirlos para fortalecer su posicionamiento global. Palermo es un ámbito emblemático de la ganadería en el continente y estamos acompañando un sinnúmero de actividades que hoy nos permiten ver esta nueva cara del sector argentino, con un viento de popa que nos pone muy contentos y nos anima a trabajar en conjunto con toda la región”, aseguró.
Orgulloso del momento ganadero que atraviesa su país, Medina Britos no ahorra números para demostrar el crecimiento. “Hace pocos años Paraguay era un proveedor marginal y hoy se ha convertido en el sexto exportador de carne del mundo. En los últimos diez años el rodeo se duplicó; el volumen de exportaciones se cuadruplicó y su valor aumentó 22 veces. Ningún país ha aumentado tanto sus ventas externas, con una clara tendencia a seguir creciendo”, aseveró.
En ese sentido, el objetivo es llegar a un rodeo de 25 millones de cabezas, desde los 15 millones actuales, para “tener saldos exportables que nos sigan fortaleciendo”, sostuvo.
Para lograrlo, la clave pasa por aprovechar las potencialidades del Chaco paraguayo, una región que “tiene el tamaño de Nueva Zelanda y en donde solamente vive el 3% de la población local”, explicó Medina Britos. Y agregó que “son tierras muy fértiles donde se consiguen fácilmente producciones de entre 200 y 250 kg de carne por hectárea con tecnologías adaptadas a ese ecosistema”.
Paraguay es un país que encuentra en su agropecuaria la mejor oportunidad de desarrollo social y económico. ‘‘A diferencia de otros países de la región, somos el país que tiene el gran potencial de producir alimentos y vemos en la demanda mundial una oportunidad’’, explicó Medina.
“En la última década el Paraguay se ha posicionado como un productor importante de alimentos. Se convirtió en el cuarto mayor exportador mundial de soja, el sexto en carne, séptimo de maíz y décimo de arroz, por dar algunos ejemplos. El país sufrió una transformación importante, que sirvió no solo para el desarrollo económico sino también social. Desde que la producción agropecuaria aumentó la pobreza en el país disminuyó de 40% a 20%, una reducción importante que marca una línea de trabajo y políticas públicas que apuntan a posicionar a Paraguay como una plataforma de la producción de alimentos para el mundo”, explicó el Viceministro de la cartera ganadera.